¿Alguna vez te has sentido atrapado en un videojuego porque necesitabas ver un anuncio para avanzar? Es una práctica común en muchos de los juegos que hay en la App Store o Google Play, algo que se ha normalizado en los últimos años. Y es que no todo el mundo está dispuesto a pagar por adelantado, y para muchos desarrolladores, esta publicidad es la única forma de ganarse la vida.
El problema está en que, aunque hay muchos modelos de negocio en los videojuegos, los juegos con un exceso de anuncios pueden convertir la experiencia del usuario en algo frustrante. Algunos títulos se pagan al completo, otros dejan jugar un capítulo y luego piden un pago para seguir. Pero la mayoría siguen el modelo de monetización basado en anuncios invasivos, donde pasar de capítulo puede convertirse en un auténtico suplicio.
Steam ha decidido acabar con este tipo de prácticas en su plataforma, en un movimiento que nos recuerda a la filosofía que Apple lleva años promoviendo: priorizar la calidad y la experiencia del usuario por encima de la monetización intrusiva. La nueva política prohíbe explícitamente los juegos que dependan de anuncios forzados para poder continuar. Desde ahora, cualquier título que utilice este tipo de tácticas será eliminado de la tienda. Es un paso importante que busca proteger la experiencia del jugador, asegurando un mínimo de calidad en todos los títulos disponibles en la plataforma.
Sin embargo, esta política no afecta a elementos integrados en el propio universo del juego, como el llamado ‘product placement’. Es decir, marcas que aparecen dentro del contexto del título, como Monster Energy en Death Stranding o las zapatillas Adidas de Spider-Man 2. Estas integraciones no interrumpen el flujo de juego y por lo tanto están permitidas. Con este movimiento, Steam pasa al ataque y se enfrenta a uno de los modelos más extendidos en los juegos móviles ofrecidos en plataformas como Google Play o la App Store. Pero lo más interesante es cómo nos recuerda a la filosofía de Apple en varios de sus servicios.
La estrategia que Steam acaba de adoptar nos recuerda claramente a las decisiones que Apple lleva años tomando: ofrecer servicios que prioricen al usuario por encima de modelos publicitarios invasivos. En Apple, esta filosofía se ve reflejada en servicios como Apple Arcade y Apple Music, donde no existen opciones gratuitas con publicidad.
En el caso de los videojuegos, Apple Arcade destaca por ofrecer una experiencia completamente limpia de anuncios y microtransacciones, algo que lo diferencia de la mayoría de servicios de gaming. Pero esta idea no es exclusiva del gaming: servicios como Apple Music, a diferencia de Spotify o YouTube Music, han optado siempre por un modelo sin anuncios, apostando por suscripciones que aseguren una experiencia fluida.
Sin embargo, hay un contraste interesante dentro del ecosistema de Apple. Aunque servicios como Arcade promueven un modelo libre de anuncios, la App Store sigue siendo un espacio donde predominan juegos con llenos de publicidad invasiva. Esto genera una paradoja: Apple defiende su filosofía en algunos servicios, pero permite estas prácticas en uno de sus pilares principales, la App Store.
La decisión de Steam también abre una pregunta importante: ¿cómo monetizar los videojuegos sin depender de anuncios? La plataforma ha sugerido varias alternativas, como modelos de compra única, microtransacciones opcionales o incluso suscripciones. Este enfoque no solo fomenta la transparencia, sino que también refuerza la confianza en la plataforma.
Lo que está claro es que tanto Steam como Apple creen en ese grupo de usuarios que valoran más la calidad de la experiencia que modelos basados en anuncios. Y aunque cada uno lo aplica a su manera, ambos parecen apuntar al mismo objetivo: una experiencia de usuario limpia, fluida y centrada en el disfrute.